5 trucos para viajar con Airbnb y triunfar

Tanto mi marido como yo somos grandes viajeros; desde que nos conocemos hemos ido probando todas las modalidades de alojamiento en función del estado de nuestras finanzas. Desde un Interrail mochilero durmiendo en campings hasta un viaje por la costa este de EEUU y Canadá en hotelazos durante nuestra luna de miel.

Tuvimos unos años de parón mientras los niños eran muy pequeños pero desde que son autónomos hemos retomado con fuerza nuestras ganas de viajar pero nos encontrábamos con el problema de que, en la mayoría de hoteles, meter a 4 personas casi siempre pasaba por pagar 2 habitaciones y, evidentemente, desde el punto de vista económico esto no nos salía muy a cuenta.

Pero entonces descubrimos Airbnb y todo cambió. Y como ya tenemos bastante experiencia he decidido compartir contigo los trucos que harán que tu viaje con Airbnb sea un éxito total.

Los detalles son importantes:

Cada uno tendrá unas prioridades a la hora de elegir alojamiento. Nosotros disfrutamos muchísimo con la idea de convertirnos, aunque sólo sea por unos días, en lugareños de la ciudad que estemos visitando. Así que cuando busco casa lo hago igual que si fuera a mudarme a vivir. Tengo que enamorarme de lo que estoy viendo.  Necesito que tenga cocina porque una de las partes que más disfrutamos con esta forma de viajar es la visita al supermercado, los desayunos en pijama mientras remoloneamos y las cenas en familia. Sin embargo con el baño somos poco exigentes, con una ducha pequeña nos arreglamos si está limpio.

Pero al final lo que nunca me ha fallado es mi intuición y la primera impresión. Jamás alquilaría una casa en cuyo perfil las fotos salgan borrosas o no estén bien orientadas (esas fotos en vertical que son horizontales me matan!!), tampoco si no me gusta la decoración o el estilo de la vivienda se aleja mucho del mío. Llámame loca pero casi siempre he alquilado als casas que me enamoraban con un detalle: las vistas del faro desde nuestra casa de La Rochelle, el balconcito de nuestro apartamento de París, la pared de piedra del estudio que alquilamos en Oporto...Y sabes lo mejor? Siempre acierto!!

Fíjate bien en lo que reservas

Te parecerá una tontería pero es importante que lo tengas en cuenta si no quieres sorpresas desagradables. Nosotros siempre seleccionamos que la vivienda sea sólo para nosotros y no para compartir y esto, junto con que las fechas seleccionadas sean las correctas, son el primer paso para que la experiencia sea un éxito. Y si no, te pasará como a una amiga que acabó compartiendo piso con los dueños porque no se fijó en ese detalle. Otra cosa más que también hay que tener en cuenta es si te proporcionan lo que en Airbnb se denomina elementos básicos: sábanas, toallas...En la mayoría de los alojamientos están incluidos pero no siempre es así.

Yo también selecciono los anfitriones con reserva inmediata; de esta manera tienes confirmación en el momento de hacer la reserva. También puedes intentar elegir Superhost: gente que lleva tiempo alquilando su casa en Airbnb con buenas evaluaciones lo que implica un extra de tranquilidad. Si no encuentras ninguna casa con este distintivo siempre puedes volver atrás y ampliar tu búsqueda.

No mentirás

Ya sé que esto es un poco de perogrullo pero me explico. Cuando alquilas su vivienda a un particular estableces con él una relación especial en la que la confianza es fundamental. Así que explica claramente cuál es tu plan de viaje; nunca ocultes que viajas con niños, en la mayoría de los alojamientos no ponen problemas, pero siempre es mejor que te quedes sin alquilar una casa que mentir. También si viajas con mascotas o el número de personas que ocupará la vivienda.

El idioma puede ser el sí

Escribe siempre unas palabras a tu anfitrión contándole quién eres y por qué vas a viajar a su país. La primera vez que utilizamos Airbnb fue para viajar a Londres. Como nosotros hablamos inglés, evidentemente nos comunicamos en este idioma. Pero el siguiente verano nos fuimos a Francia y, dado que ninguno de nosotros habla francés, nos dirigimos a nuestros anfitriones en español. No exagero si te digo que nos denegaron unos 5 alojamientos. Yo ya estaba empezando a sudar porque necesitábamos al menos 3 casas diferentes en nuestro recorrido hasta la Bretaña así que decidí cambiar mi estrategia. Empecé a traducir mis mensajes a francés y a partir de ahí empezaron los síes. ¿Casualidad? Tal vez. Lo cierto es que, si me pongo en su lugar, yo también agradecería que hicieran el esfuerzo de hablar en mi idioma aunque sea con la macarrónica traducción automática.

Las temidas cancelaciones

Aquí vienen las malas noticias. No he tenido que sufrirlo en mis propias carnes pero supongo que es lo peor que puede sucederte en tus vacaciones. Evidentemente, existe por parte de Airbnb el compromiso de reembolso y el intento de ayudarte a encontrar una alternativa de alojamiento, pero esto último sin garantías. Por eso es importante leerse todos los comentarios que han hecho otros usuarios; si la mayoría son negativos o hablan de cancelaciones, huye!!.

Espero que mis consejos te ayuden a tener unas buenas vacaciones con Airbnb! Si te animas aprobarlo cuéntamelo por aquí!